Hoy es martes 19 de
noviembre y estoy a ley de 1 caja por terminar de empacar mi vida y partir
hacia otro lugar. Me queda 10 días en el lugar en el cual llamé mi hogar por
los pasados 15 años…Puerto Rico.
Lugar en el cual crecí,
caí, aprendí, perdí, amé, lloré, me emborraché, pensé, imaginé, soñé, gradué y
logré mis metas. Lugar donde viven mis mejores amigos y mis mejores recuerdos.
Los que me conocen saben
que desde hace unos años para acá se me hace un poco difícil quedarme mucho
tiempo en un lugar. Será cosas de la edad y mis anhelos por conocer el más
allá. Aprovechar estos añitos que no existen niños ni marido en mi vida y me
puedo dar el lujo de recoger varias cosas e irme sin dar explicaciones ni tener
una razón por la cual mirar hacia atrás.
Hace un tiempito mi
trabajo me ofreció trasladarme a sus oficinas de Miami y está demás decir que
me cagué encima un poco y me tomó 1-2 días pensarlo…pero por supuesto dije que
sí. Dije que sí porque lamentablemente no tengo una razón lo suficientemente
válida para quedarme en esta Isla que cada día va más en deterioro. Un lugar
donde temo por salir a botar la basura o caminar sola por la cera después de
las 9PM. Un lugar donde cada día el gobierno nos exprime el vivir y la clase
trabajadora sufre más y más. Un lugar donde desafortunadamente los salarios dan
pena, sin embargo nos explotan como esclavos. Así que digo PRESENTE al éxodo de
personas educadas que se van de esta Isla en busca de una mejor calidad de vida
y mejores oportunidades. Te amo Puerto Rico pero me estás hundiendo y no me
puedo dejar llevar.
Admitiré que visitaré las
veces que sea posible ya que estaré a un brinquito de aquí y no pienso
abandonar mis queridas amistades que siempre han estado ahí para mí sin
importar la distancia, a ustedes les doy las gracias porque siempre estuvieron
para levantarme cada vez que caí.
Así que de ahora en
adelante les contaré de mis aventura por el 305 y qué tal me va por allá. Tengo
un mar de emociones que da una mala barriga peor que la de una embarazada pero
tengo fe en que este nuevo capítulo de mi vida será uno de muchas bendiciones y
éxitos profesionales. Total, si sobreviví en Madrid, creo que puedo sobrevivir
en cualquier lugar J
¡Hasta luego!
